La Santísima Trinidad un Misterio Actual

José Kentenich

Introducción

A lo largo de tres años nos hemos hecho eco de la invitación del Santo Padre a acompañarlo camino hacia el Jubileo del año 2000. Recorriendo este camino, muchas comunidades eclesiales y movimientos apostólicos encontraron nueva alegría en las verdades centrales de nuestra fe.

Nos encontramos ahora en los umbrales del Año Santo y nos preparamos a ingresar en la celebración del aniversario del nacimiento de nuestro Señor, en el año de gracia del Jubileo. Según la intención del Santo Padre, el gran año jubilar debe tener como meta la “glorificación de la Trinidad”. En la “Bula de Convocación del gran Jubileo del año 2000” el Papa escribe: “Al celebrar la Encarnación, tenemos la mirada fija en el misterio de la Trinidad” (Incarnationis mysterium, Art. 3). Tal vez, algunas personas tengan temor de que este misterio de la Trinidad pueda ser demasiado exigente para nosotros y aportar demasiado poco para nuestra vida. Para algunos cristianos es ya suficiente esfuerzo sólo creer en Dios cuando, a su alrededor, la fe se desvanece y muchos están tentados de rechazar esta invitación, preocupados de que su fe pudiese tornarse aún más difícil e innecesariamente complicada.

Con todo, guiados por el fundador de la Familia de Schoenstatt, P. José Kentenich, quisiera invitarlos a contemplar el misterio del Dios Trino y a acoger el impulso que él da para descubrir el valor que ese misterio posee para nuestra vida. Me atrevo a formular esta invitación en la confianza de que, habiendo recorrido juntos el camino de los años dedicados a Cristo, al Espíritu Santo y a Dios Padre, respectivamente, hayamos puesto las bases sobre las cuales recién se puede comenzar a plantear la pregunta acerca de la Trinidad.

Como al inicio del cristianismo, el interés por la Trinidad de Dios resulta también hoy de la experiencia vital de la vinculación con Dios Padre, con Jesucristo y con el Espíritu Santo.

Durante su larga vida sacerdotal, el P. José Kentenich condujo a su Familia una y otra vez hacia el misterio del Dios Trino. Con ello no pretendía entregar un nuevo tratado sobre la Trinidad. El aporte del P. Kentenich presupone la fe de la Iglesia y el servicio y esfuerzo de la teología. El se comprende a sí mismo como “oficial de enlace” entre la teología y la vida, y ve su gran tarea en despertar en su familia espiritual una auténtica vida religiosa. A él le interesa señalar las grandes proyecciones que se siguen para el hombre y para la comunidad a partir del misterio de la Trinidad como misterio central del cristianismo. De esa manera, a lo largo de muchos años, se ha acumulado un rico tesoro de textos suyos, cuya fuerza inspiradora y fecundidad hemos aprendido a valorar nuevamente en este camino hacia el Jubileo de la redención. Por esa razón, editamos ahora esta nueva colección temática de textos del P. Kentenich, con ocasión del año 2000.

Al comienzo de esta selección de textos hemos puesto, a modo de preludio, una auténtica interpretación del P. Kentenich respecto de los primeros versos de su colección de oraciones titulada “Hacia el Padre”1. El mismo interpreta allí la oración matutina de su prisión en Dachau como Oración en la mañana de los más nuevos tiempos. Partiendo del saludo matinal cotidiano al Padre, al Hijo y al Espíritu, nos introduce en las grandes dimensiones del amor trinitario. La sencilla oración de la mañana se transforma, a través de su interpretación, en una oración matutina en los umbrales del próximo milenio en el horizonte del misterio de la Trinidad. También en otras oraciones de esa “escuela de oración” que es el Hacia el Padre, podemos encontrar la huella de su pensamiento y de su orar trinitarios. Entre esas oraciones de Dachau, quisiera señalar particularmente el Gloria y el Credo de la Misa del Instrumento, así como también la Oración para después de la consagración y las doxologías en las horas del Oficio de Schoenstatt y en las estaciones del Vía Crucis del Instrumento.

Antes de cada esfuerzo intelectual y espiritual por acceder a la Trinidad convendrá recordar la magnitud e incomprensibilidad de este misterio. Según el P. Kentenich nunca podremos elucidarlo completamente, ni aquí ni en el cielo. Pertenece a la esencia de Dios el no ser comprensible. A pesar de ello, vale la pena acercarse a este misterio con un pensar respetuoso, apoyados en la credibilidad de Jesús. Ya la experiencia misma de que a un gran hombre sólo podemos comprenderlo parcialmente, y de que, en última instancia, no podemos abarcarlo en su ser persona, hará que, en relación a Dios, tengamos una actitud respetuosa ante su misterio.


Para activar la descarga es necesario una suscripción. Algunos libros requieren de una suscripción premium.

epub
epub
mobi
mobi
pdf
pdf


Adquiere una suscripción

¿Ya tienes una suscripción?

Ingresa aquí:


DETALLES DE ESTE LIBRO


Más de este autor/tema


La Renovación de la Iglesia

La Renovación de la Iglesia

Aconteció el 8 de diciembre de 1965. Cientos de miles de personas se habían congregado en la plaza de san Pedro. Se celebraba la clausura ...
El Verdadero amor

El Verdadero amor

Durante su permanencia en Milwaukee, el P. Kentenich tuvo a su cargo la atención pastoral de la colonia alemana de esa ciudad. Regularmente, celebraba la ...
Hacia el Padre

Hacia el Padre

EL AUTOR El P. José Kentenich (1885-1968) es el fundador de la Obra de Schoenstatt. Su proceso de beatificación fue iniciado oficialmente el Año Santo ...
Abbá José

Abbá José

Tan entrañable, palpitante, íntima es la palabra. Ningún judío la hubiese usurpado para decirla del Dios verdadero. Sólo Jesús podía modularla. De él la escucharon ...
Las Fuentes de la Alegría

Las Fuentes de la Alegría

En esta obra, el P. José Kentenich enfrenta con especial eficacia anhelos muy profundos de nuestro tiempo y entrega una respuesta plenamente católica y fructífera ...
Santidad ¡Ahora!

Santidad ¡Ahora!

¿Qué es la santidad? Hay muchas respuestas a esta pregunta: las cualidades típicas de un santo; vivir en estado de gracia; el proceso de llegar ...
La Actualidad de María

La Actualidad de María

No ha sido tarea fácil realizar esta selección de textos marianos del P. José Kentenich. En primer lugar, debido a su incontable cantidad y, por ...
Nuestra Vida Afectiva

Nuestra Vida Afectiva

Sabemos por experiencia qué son los sentimientos y los afectos. Pero también sabemos que nos resulta difícil describirlos y analizarlos racionalmente. Conocemos su complejidad y ...
Cristo es mi vida

Cristo es mi vida

Toda espiritualidad eclesial, toda propuesta pastoral tienen una cristología implícita o explícita. Así es en el P. José Kentenich. El mismo formuló su visión de ...
Desafío de nuestro tiempo

Desafío de nuestro tiempo

“Desafíos de nuestro tiempo” es una selección de textos del P. José Kentenich, fundador del Movimiento de Schoenstatt. Son textos que provienen de un hombre ...
La caridad evangelica

La caridad evangelica

Ofrecemos en este nuevo folleto de “Temas de meditación” una serie de esquemas teológicos en tomo a la caridad cristiana, que es la más importante ...
La Práctica de la Presencia de Dios

La Práctica de la Presencia de Dios

Aunque había llevado la vida normal de cualquier joven francés de clase media de inicios del siglo XVI, Nicolás Herman, nacido alrededor de 1610 en ...
Libro de Oración Católica

Libro de Oración Católica

`OH, JESÚS, Vos conocíais mi miseria antes de fijar en mí Vuestros ojos, y ella, lejos de hacéroslos apartar, ha hecho que me amaseis con ...
Santa Gema Galgani Amor Total

Santa Gema Galgani Amor Total

La vida de santa Gema Galgani puede resumirse diciendo que fue una vida de amor total a Cristo. Amor sin condiciones y hasta el fin ...
Tu puedes ser santo, vida de san Josemaría Escrivá de Balaguer

Tu puedes ser santo, vida de san Josemaría Escrivá de Balaguer

La vida de san Josemaría Escrivá de Balaguer es una vida hermosa. Él nos enseña que todos podemos llegar a la santidad, que ser santos ...
Abrahan y Sara

Abrahan y Sara

La Biblia cuenta que hace ya muchos años, más o menos en 1750 antes del nacimiento de Jesús, un hombre, llamado Abrahán, preparó sus cosas ...
Amor y perdón San Juan Bautista María Vianney

Amor y perdón San Juan Bautista María Vianney

Quien siga la lectura de estas homilías que el Santo Cura de Ars predicaba a sus rústicos feligreses, se verá arrastrado a tomar en serio ...
El católico atento

El católico atento

Greg Bottaro fue un estudiante mío en el Boston College. Era un muy buen estudiante, pero incluso los muy buenos estudiantes rara vez escriben libros ...
La Trinidad explicada hoy

La Trinidad explicada hoy

Un día estaba hablando con un amigo filósofo sobre mis últimos estudios acerca de la Trinidad y me dijo: 'Cierto, Dios es uno, aunque es ...
Jesús, Dios entre Nosotros

Jesús, Dios entre Nosotros

El presente trabajo es una selección de frases del Papa Francisco, entresacadas de sus catequesis, homilías, mensajes y discursos, pronunciados a lo largo de su ...
El Espíritu Santo

El Espíritu Santo

Estamos en un nuevo milenio. El Papa san Juan Pablo II lo ha nombrado el milenio del laico. Varios obispos lo resuenan con sus propias ...
La comunión de los santos

La comunión de los santos

Vive tu vida con alegría. La vida es un don maravilloso. Fuimos creados para el gozo y la alegría de vivir con Dios, pero el ...
Pasó haciendo el bien

Pasó haciendo el bien

Pasó haciendo el bien se centra en las virtudes humanas que todo hombre puede –debe– practicar a imitación del Señor para ser honrado, justo, optimista, ...
La Teología de Joseph Ratzinger

La Teología de Joseph Ratzinger

A mis alumnos «Ratzinger es sin duda uno de los teólogos más conocidos y más discutidos del siglo XX», ha afirmado un autor italiano. Y ...
Getsemaní. En oración con Jesucristo

Getsemaní. En oración con Jesucristo

Getsemaní. Horas de amargura humana para Jesús; horas de paz inefable en el hondón de su espíritu, porque cumple la Voluntad santa de su Padre ...
El Bautismo según los Padres Griegos

El Bautismo según los Padres Griegos

El bautismo, común a numerosas religiones, simbolizaba particularmente para lo esenios, el esfuerzo por una vida pura, la aspiración a la gracia purificadora. Con la ...
Cartas a un Joven Católico

Cartas a un Joven Católico

La pretendida «muerte de Dios», anunciada por Nietzsche, no dio lugar en el siglo pasado a la afirmación del hombre o a su liberación. Nada ...
Simone Weil: El Espíritu sopla donde quiere

Simone Weil: El Espíritu sopla donde quiere

Como diría San Jerónimo, es necesario un prólogo con casco para justificar la presencia en este simposio de pensadores cristianos, junto a tantos y tan ...
Profecías de Ana Catalina Emmerich

Profecías de Ana Catalina Emmerich

Vi diferentes partes de la tierra: mi guía me nombró Europa y, mostrándome un rincón arenoso, me dijo estas importantes palabras: – He aquí la ...
Nuestra Señora del Buen Suceso

Nuestra Señora del Buen Suceso

Era el año 1563. En la Provincia vasca de Vizcaya, cerca de la frontera con Francia. En una familia aristocrática de España, Mariana Francisca de ...
Dios existe, yo me lo encontré

Dios existe, yo me lo encontré

«Los convertidos son molestos», dice Bernanos. Por esa razón, y por algunas otras, he diferido mucho tiempo el escribir este relato. Es difícil, efectivamente, que ...
Oraciones a La Santísima Virgen María

Oraciones a La Santísima Virgen María

¡María! ¡María! ¡Dulcísima María, Madre querida y poderosa Auxiliadora mía! Aquí me tienes; tu voz maternal ha dado nuevos bríos a mi alma y anhelosa ...
Devocionario de 1931

Devocionario de 1931

La religión cristiana está extendida por todo el mundo y a ella debemos nuestra civilización. Saber, pues, lo que es dicha religión es asunto que ...
María Magdalena: icono del discipulado

María Magdalena: icono del discipulado

Búsqueda en la noche Pocos personajes de la Escritura han sido tan deformados por la religiosidad popular como María Magdalena, a la que muchísima gente, ...
Florecillas del Sagrario

Florecillas del Sagrario

Qué Pedagogía tan misteriosa y tan paradójica la de nuestro Maestro Jesús! Con palabra infalible enseña a los hombres que la felicidad y la vida ...
Lo eterno sin disimulo

Lo eterno sin disimulo

La fe es un tesoro enorme, como un caudal abundante e inagotable de bienes; y el creyente de fe limpia, profundamente enraizada, de fe fecunda ...
Creo

Creo

PROFESAMOS nuestra fe en Dios Trino y su Iglesia cada domingo que asistimos a Misa. ¿Sabemos lo que profesamos? ¿Entendemos lo que hacemos y decimos? ...
La eugenesia y otras desgracias

La eugenesia y otras desgracias

Publico hoy estos artículos por un motivo especial, relacionado con la presente situación; motivo que quiero subrayar y dejar bien claro. La mayoría de las ...
Las maravillas del Santo Nombre de Jesús

Las maravillas del Santo Nombre de Jesús

Por lo cual Dios le exaltó y le otorgó un nombre sobre todo nombre, para que al nombre de Jesús doblen la rodilla todas las ...
Homilías y Discursos del papa Francisco en México

Homilías y Discursos del papa Francisco en México

Declaración conjunta del Papa Francisco y el Patriarca Kirill, de la Iglesia Ortodoxa Rusa 1. Discurso a las autoridades civiles, militares y religiosas, en el ...
0 comentarios

Dejar un comentario

¿Quieres unirte a la conversación?
Siéntete libre de contribuir!

Deja una respuesta