Razones para la alegría

José Luis Martín Descalzo

Introducción

Me pregunto si la mañana de hoy es, precisamente, la ideal para escribir el prólogo de un libro que se titula Razones para la alegría. Anteayer me llamó el editor para meterme prisas, diciéndome que, si quiero llegar con él a la Feria del Libro, tendré que enviarle los originales esta misma semana. «Tranquilo, tranquilo, le he dicho. El libro está listo, sólo me falta el prólogo y mañana mismo lo remato.»

Pero esta mañana ha ocurrido «algo». En la rutinaria revisión que cada dos meses hacen a mi corazón y mis riñones se los han encontrado más pachuchos de lo que yo me imaginaba. Y me han anunciado que mañana o pasado entro en diálisis.

Al llegar a casa me he encontrado de pronto como vacío. ¿Me ponía a llorar? ¿Me dedicaba a compadecerme? Me ha parecido más lógico intentar hacer algo. Pero ¿cómo escribir un prólogo sobre la alegría cuando acaba de derrumbársete un trozo de alma, cuando aún estás intentando tragarte la noticia de que en lo que te resta de vida permanecerás cinco horas, un día sí y otro no, atado a una máquina?

Me detengo. Y pienso que hoy es el día EXACTO para hablar de la alegría. Porque el gozo que van a pregonar estas páginas que siguen no es el que se experimenta porque las cosas vayan bien, sino el que no cesa de brotar «a pesar de que» las cosas vayan cuesta arriba. (No quiero decir mal.) Este es, me parece, el sentido de la bienaventuranza cristiana: no se promete en ella la felicidad a los pobres porque vayan a dejar de serlo, ni a los que tienen hambre porque ya está llegando alguien con un bocadillo. El gozo que allí se promete es aquel en el que las razones para la alegría son más fuertes que las razones para la tristeza, no el gozo que proporcionan la morfina o la siesta.

A esa alegría -os lo juro- no estoy dispuesto a renunciar. Bastaría la acogida que estas cosillas mías están teniendo para sostenerme. ¿Sabéis? Es asombroso cuánto amor gira sobre el mundo sin que los tontos lo percibamos, cuánta gente nos quiere sin que lo descubramos, en qué misteriosos lugares puede germinar nuestra palabra sin que lleguemos a enterarnos.

Hace tres años ya empecé este «cuaderno de apuntes» en A B C, y desde entonces no he cesado de sentirme acompañado en mi aventura. Razones para la esperanza, que recogió la primera parte de estas notas, tuvo un éxito -para mí asombroso- que le hace andar ya por su tercera edición en pocos meses. Este segundo hermano prolonga mi testimonio de fe en la vida. En la vida con minúscula y en la gran Vida con mayúscula. Ojalá sea útil para alguien. Ojalá caliente algún corazón. Ojalá ayude a alguno a recuperar la le en su propia alegría.

P. S.-Una nueva razón para la alegría: cuarenta y ocho horas después de escrito este prologuillo -en el que yo aprovechaba mi enfermedad para pavonearme un poco de héroe- el médico me concede un mes más de «amnistía». Me alegra, claro. Y -después de reírme un poquito de mi melodramática introducción- me dispongo a robarle a la enfermedad un mes. 0 dos. 0 todos los que se deje. Y añado esta posdata para tranquilidad de mis amigos.


Para activar la descarga es necesario una suscripción. Algunos libros requieren de una suscripción premium.

epub
epub
mobi
mobi
pdf
pdf


Adquiere una suscripción

¿Ya tienes una suscripción?

Ingresa aquí:


DETALLES DE ESTE LIBRO


Más de este autor/tema


Razones para la esperanza

Razones para la esperanza

El reportaje más sádico ¡que he leído en toda mi vida es este que publica el dominical de uno de los diarios madrileños. Bajo el ...
Vida y misterio de Jesús de Nazaret, I. Los comienzos

Vida y misterio de Jesús de Nazaret, I. Los comienzos

Y vosotros ¿quién decís que soy yo? (Mc 8,27). Hace dos mil años un hombre formuló esta pregunta a un grupo de amigos. Y la ...
La frontera de Dios

La frontera de Dios

Amigo Editor: No me quedo tranquilo si no escribo estas líneas. Necesito decir un par de cosas, y, aunque esto no se use, usted me ...
Razones Para El Amor

Razones Para El Amor

Cuando, hace ahora cuatro años, comencé esta aventura de mis «razones», nunca pude imaginar lo que para mí llegarían a significar. Es asombroso: lanzas un ...
Razones desde la otra orilla

Razones desde la otra orilla

Verán, veremos, sus innumerables amigos, cómo José Luis se las compondrá para seguir presente aquí abajo, entre nosotros, haciendo cosas, publicando artículos y libros. Lo ...
Vida y misterio de Jesús de Nazaret, II. El mensaje

Vida y misterio de Jesús de Nazaret, II. El mensaje

Pero ellos no entendían lo que les decía y no se atrevían a hacerle preguntas (Mc 9,32). El primer volumen de esta obra se cerraba ...
Vida y misterio de Jesús de Nazaret, III. La cruz y la gloria

Vida y misterio de Jesús de Nazaret, III. La cruz y la gloria

Jesús no fue sólo un buen maestro, ni fue únicamente un predicador de ideas revolucionarias. Empequeñeceríamos su mensaje si lo redujéramos a sus discursos, por ...
Razones para vivir

Razones para vivir

Y van… cuatro. Cuando, hace ahora cuatro años, firmé la introducción de «Razones para el amor» me prometí a mis lectores que aquélla era la ...
Exhortaciones apostólicas

Exhortaciones apostólicas

1. Sacramento de la caridad, la Santísima Eucaristía es el don que Jesucristo hace de sí mismo, revelándonos el amor infinito de Dios por cada ...
Católico defiende tu fe

Católico defiende tu fe

Con frecuencia, nos visitan hermanos de otras religiones. ¿Qué debemos hacer? En primer lugar, si estamos preparados, procurar, con el celo de Dios, convertirlos a ...
Oraciones para colorear y hablar con Dios  para niños de Educación Primaria

Oraciones para colorear y hablar con Dios para niños de Educación Primaria

Para padres, catequistas y educadores. De la misma manera que desde que nacen nos preocupamos y ocupamos de que nuestros niños y niñas aprendan a ...
Educar, elegir la vida

Educar, elegir la vida

Hace exactamente un año, iniciaba mi mensaje a las comunidades educativas hablando de un momento crítico y decisivo en la vida de nuestro pueblo. Muchas ...
La siempre Virgen Santa María de Guadalupe en España y México

La siempre Virgen Santa María de Guadalupe en España y México

NUESTRA SEÑORA DE GUADALUPE En Cáceres, España. La Imagen española de la "Guadalupe" es una antigua talla de madera de cedro, revestida por ricos mantos ...
Confesiones de San Agustín

Confesiones de San Agustín

Una de las autobiografías más famosas del mundo, las Confesiones de San Agustín, comienza de esta manera: “Grande eres Tu, Oh Señor, digno de alabanza ...
Fundamentos y práctica de la Vida Mariana

Fundamentos y práctica de la Vida Mariana

Desde hace casi veinte años escribimos en cada número de nuestra modesta revista «Mediadora y Reina» un artículo sobre la vida mariana, tal como la ...
Obras Completas de Santa Teresita del Niño Jesús

Obras Completas de Santa Teresita del Niño Jesús

Dos de estos tres textos de inapreciable valor (e indirectamente, de rebote, también el tercero) se los debemos a la hermana mayor de Teresa, María ...
Atreverse a decidir: Sin miedo ni complejos

Atreverse a decidir: Sin miedo ni complejos

Siempre me ha llamado la atención la dificultad que experimentan algunos a la hora de decidir. Dudan, titubean, sopesan los pros y los contras, y ...
Memorias de la casa de los muertos

Memorias de la casa de los muertos

En medio de las estepas, de las montañas y de los inextricables bosques de las más apartadas regiones de la Siberia, se encuentran de vez ...
Novena a Santa Dymphna

Novena a Santa Dymphna

  Santa Dimfna de Gheel, su fiesta es celebrada el 15 de Mayo, es considerada patrona de  los portadores de deficiencia mental y enfermedades de ...
Para Mejorar Tus Confesiones

Para Mejorar Tus Confesiones

La confesión puede ser una experiencia profundamente liberadora, que nos ayude a crecer y a vivir mejor. Además, si este sacramento es un regalo de ...
La Nube del No Saber

La Nube del No Saber

En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Cualquiera que seas el que tiene en sus manos este libro, has de ...
Id y Evangelizad a Los Bautizados

Id y Evangelizad a Los Bautizados

En el principio de la vida de la Iglesia se bautizaba solo a los convertidos. La tarea es al contrario: convertir a los bautizados. En ...
Edith Stein

Edith Stein

El Papa Juan Pablo II en 1999, junto a San Benito, San Cirilo y San Metodio, proclamó Patronos de Europa a tres figuras femeninas: Santa ...
Ver o perecer mística de ojos abiertos

Ver o perecer mística de ojos abiertos

Las épocas de grandes cambios que han estremecido a los pueblos y a la Iglesia han sido también tiempos de grandes místicos que han percibido ...
La Maravilla de ser Hijo de Dios

La Maravilla de ser Hijo de Dios

En este libro quiero tratar de un modo sencillo del ser humano. El hombre puede ser un “ángel” o un “demonio”, pero siempre lo amará ...
El taller del orfebre

El taller del orfebre

El taller del orfebre se publicó por primera vez en 1960 en la revista Znak, bajo el pseudónimo de Andrzej Jawien. Se engañaría quien viera ...
Que brille la Luz de Dios

Que brille la Luz de Dios

El 19 de abril, en Roma, los cardenales de la Iglesia Católica eligieron al Papa Benedicto XVI, de setenta y ocho años de edad, para ...
Vita Antonii, Vida de san Antonio Abad

Vita Antonii, Vida de san Antonio Abad

San Atanasio escribe la vida de San Antonio según la mayor parte de los críticos, poco después de su muerte en el 356. Antonio había ...
Y de repente, Teresa

Y de repente, Teresa

En que sabremos quién es don Rodrigo de Castro Osorio, inquisidor de gran inteligencia, fina intuición y méritos bastantes, que se atrevió a meter en ...
El Salvador y su amor por nosotros

El Salvador y su amor por nosotros

En el transcurso de la historia se han escrito buenos tratados sobre Jesucristo: estudios de hondura teológica, biografías de su caminar por la tierra, comentarios ...
Echad las redes, Ciclo A

Echad las redes, Ciclo A

DESDE 1995 al 2001 he tenido el gozo de explicar, cada sábado, el Evangelio dominical en la TV con la rúbrica Las razones de la ...
365 días con San Ignacio de Loyola

365 días con San Ignacio de Loyola

Se ha escrito mucho sobre san Ignacio de Loyola y por tanto no vamos a descubrir nada nuevo, pero sí queremos reseñar algunos puntos que ...
Camperas

Camperas

Amigos de Dios: una buena mañana resulta que me determiné a escribir fábulas, que son, según Aristóteles, lo más fácil de la literatura. Agarro, pues, ...
Vida de María Elisabetta Hesselblad

Vida de María Elisabetta Hesselblad

POCOS meses después de haber concluido la celebración del primer centenario de la fundación de la Orden del Santísimo Salvador de Santa Brígida (1911-2011), por ...
La Misa y la vida interior

La Misa y la vida interior

Felicítate, lector, si este opúsculo ha venido a parar a tus manos, porque puede ser para ti el remedio de tu indigencia espiritual, poniendo en ...
Acudir a Dios en la angustia

Acudir a Dios en la angustia

En los opúsculos de Karl Rahner aparecidos hasta el momento hemos seleccionado en gran parte ensayos y piezas individuales relativamente independientes. Cuando Andreas R. Batlogg ...
Santo Padre Pío de Pietrelcina

Santo Padre Pío de Pietrelcina

El Padre Pío de Pietrelcina que se llamó Francesco Forgione, nació en Pietrelcina, en un pequeño pueblo de la provincia de Benevento, el 25 de ...
Sentencias de los Padres del Desierto

Sentencias de los Padres del Desierto

 1. Preguntó uno al abad Antonio: «¿Qué debo hacer para agradar a Dios?» El anciano le respondió: «Guarda esto que re mando: donde quiera que ...
0 comentarios

Dejar un comentario

¿Quieres unirte a la conversación?
Siéntete libre de contribuir!

Deja una respuesta