El drama del humanismo ateo

Henri de Lubac

PRÓLOGO

Si los diferentes capítulos de esta obra no están organizados dentro de un todo sistemático, tampoco su objeto es, en la intención de su autor, verdaderamente uno. Bajo las innumerables corrientes que afloran en la superficie externa de nuestro pensamiento contemporáneo, nos parece que existe un profundo común denominador, antiguo ya, o mejor dicho, algo como una inmensa «deriva». Debido a la acción de una parte considerable de nuestra minoría pensadora, la humanidad occidental reniega de sus orígenes cristianos y se separa de Dios. No hablamos de un ateísmo vulgar, que es propio, más o menos, de todas las épocas y que no ofrece nada significativo; tampoco nos referimos a un ateísmo puramente crítico, cuyos efectos continúan extendiéndose hoy, pero que no constituye una fuerza viva, porque se revela incapaz de reemplazar aquello que destruye. Éste es únicamente capaz de ofrecer el terreno propicio para aquello que precisamente queremos estudiar. Cada vez más, el ateísmo contemporáneo se torna positivo, orgánico, constructivo. Uniendo a un inmanentismo de naturaleza mística, una conciencia clara del acontecer humano, ofrece tres aspectos principales que podrían ser simbolizados con tres nombres: Augusto Comte, Feuerbach (al que habría que añadir el nombre de su discípulo Marx) y Nietzsche. A través de una serie de intermediarios, adiciones, mezclas y frecuentemente deformaciones, las doctrinas de estos tres pensadores del último siglo inspiran, incluso hoy, tres filosofías de la existencia social y política y también individual, cada una de las cuales ejerce una influencia muy importante. La actualidad de su estudio es, pues, más que manifiesta. Sean las que sean las vicisitudes de las causas y partidos que luchan por alcanzar la primacía, existe el peligro de que, bajo formas quizá renovadas, sigan siendo actuales durante largo tiempo.

Humanismo positivista, humanismo marxista, humanismo nietzscheano son, más que un ateísmo propiamente dicho, una antiteísmo, y más concretamente un anticristianismo, por la negación que hay en su base. Por opuestos que sean entre sí, sus mutuas implicaciones, escondidas o patentes, son muy grandes y tienen un fundamento común consistente en la negación de Dios, coincidiendo también en su objetivo principal de aniquilar la persona humana. Nos hemos esforzado en poner bien en claro este doble carácter, creyendo que la simple exposición sería, indudablemente, si no la más eficaz de las «refutaciones», al menos por la que debe empezarse. El lector apenas encontrará en estas páginas discusiones teóricas. No encontrará nada de eso que comúnmente se llama «teología». No es más que un cuadro histórico, cuyo rasgo esencial, que nos parece poco acentuado en general, lo hemos subrayado fuertemente.

Se trata pues, sobre todo, de una «toma de conciencia», que proponemos a los cristianos, sobre la situación espiritual del mundo en que viven. No ignoramos que el positivismo es una inmensa construcción de filosofía científica y de «política positiva»; que el marxismo, que tiene su Summa, si no su Biblia, en El Capital, es un basto y poderoso sistema de economía política y social; que el pensamiento de Nietzsche ofrece un caudal de recursos pedagógicos, en el sentido más profundo de la palabra, de una extraordinaria riqueza.

Hay muchos elementos sobre los cuales el cristiano, en cuanto tal, no tiene que tomar posición; muchos otros, frecuentemente contradictorios, que puede con todo derecho considerarlos como suyos apartándolos de la síntesis que los falsea, pudiéndolos reconciliar. Y también encontrará muchas agudezas de las cuales no ha de tener ningún miedo. Añadamos que leerá aquí críticas con el propósito más blasfemo, pero cuya exactitud tendrá que reconocer. Estos tres conjuntos no son, por lo general, tres bloques irrompibles. En la vida real de las conciencias se operan muchas disociaciones, de suerte que todos los que se dicen, y que son en gran parte positivistas, marxistas o nietzscheano s, no son, sin embargo, ateos. Algunos, por ejemplo, dejan abierto el problema metafísico no adhiriéndose al marxismo más que en función de su programa social, y también, sin examen exacto de este programa, sino solamente en razón de sus propias aspiraciones sociales, más cristianos a veces que los que los combaten. También sabemos que muchos pensamientos cuyo origen es marxista, nietzscheano o positivista pueden encontrar su lugar en ciertos esbozos de síntesis nuevas, de las cuales no señalaremos ni su ortodoxia, ni su valor, ni su oportunidad. La obra de asimilación no cesa nunca en la Iglesia, ni es nunca demasiado pronto para comenzarla. Tampoco es menor la existencia de una lógica interna de los sistemas que sostiene su inspiración funcional. Esto es lo que es preciso ver ahora con toda claridad, si no se quiere correr el riesgo de extraviarse peligrosamente. En el triple caso presente, esta inspiración, esta lógica coloca con fuerza a nuestra humanidad lejos de Dios, arrastrándola al mismo tiempo por los caminos de una doble esclavitud social y espiritual.


Para activar la descarga es necesario una suscripción. Algunos libros requieren de una suscripción premium.

epub
epub
mobi
mobi
pdf
pdf


Adquiere una suscripción

¿Ya tienes una suscripción?

Ingresa aquí:


DETALLES DE ESTE LIBRO


Más de este autor/tema


El Origen de la Religión

El Origen de la Religión

HAY todavía una segunda ilusión también frecuente. Se imagina que podemos obtener un resultado serio reuniendo desordenadamente una serie de datos observados en los pueblos ...
Meditación sobre la Iglesia

Meditación sobre la Iglesia

SIGNIFICACIÓN PERMANENTE DE UNA «MEDITACIÓN SOBRE LA IGLESIA» Mons. Ricardo Blázquez El padre Henri de Lubac murió a la edad de los grandes patriarcas: colmado ...
La paz interior

La paz interior

La experiencia os demostrará que la paz, que infundirá en vosotros la caridad, el amor a Dios y al prójimo, es el camino seguro hacia ...
La alegría de perdonar

La alegría de perdonar

Perdonar, y hacerlo de corazón, es una asignatura importante pero difícil de cursar. Hoy, sin embargo, la necesitamos quizá más que nunca. Vemos cómo a ...
Abbá José

Abbá José

Tan entrañable, palpitante, íntima es la palabra. Ningún judío la hubiese usurpado para decirla del Dios verdadero. Sólo Jesús podía modularla. De él la escucharon ...
CONMONITORIO (Apuntes para conocer la fe verdadera)

CONMONITORIO (Apuntes para conocer la fe verdadera)

1. Dado que la Escritura nos aconseja: Pregunta a tus padres y te explicarán, a tus ancianos y te enseñarán1; Presta oídos a las palabras ...
El escándalo del padre Brown

El escándalo del padre Brown

No sería honesto contar las aventuras del padre Brown sin admitir que una vez estuvo envuelto en un gran escándalo. Todavía existen personas, quizás entre ...
México católico Proyectos y trayectorias eclesiales

México católico Proyectos y trayectorias eclesiales

Marta Eugenia García Ugarte y Pablo Serrano Álvarez Las obras colectivas sobre la Iglesia católica en México han proliferado en los últimos años. Entre los ...
Los Diez Mandamientos

Los Diez Mandamientos

  1. TRES cosas le son necesarias al hombre para su salvación: el conocimiento de lo que debe creer, el conocimiento de lo que debe ...
Todo es gracia: En el corazón de la vida cristiana

Todo es gracia: En el corazón de la vida cristiana

La palabra gracia es muy utilizada en el lenguaje de la Iglesia, pero si saliéramos a la calle y preguntáramos a los fieles cristianos qué ...
Nada te turbe, Nada te espante

Nada te turbe, Nada te espante

Santa Teresa de Jesús nació en Ávila en la madrugada del miércoles día 28 de marzo de 1515, y murió santísimamente a las nueve de ...
Homilías sobre el evangelio de San Mateo

Homilías sobre el evangelio de San Mateo

San Juan Crisóstomo, luminar mayor de la Iglesia universal, que sólo tiene par, en Occidente, con San Agustín, y el más grande, sin duda, de ...
Francisco, el nuevo Juan XXIII

Francisco, el nuevo Juan XXIII

“Ve, Francisco y repara mi Iglesia en ruinas” José Bono, expresidente del Congreso de los Diputados Nacióle un sol al mundo.  Dante Alighieri La tarde ...
La Palabra continúa en el signo de los tiempos Volumenes I, II y III

La Palabra continúa en el signo de los tiempos Volumenes I, II y III

«Si prestas atención, hasta las piedras hablan» (Gitta Mallasz) ¡Querido lector de estos mensajes de Jesús! Si en tu espíritu existe un profundo deseo de ...
El Primer Amor del Mundo

El Primer Amor del Mundo

Todo ser humano tiene en lo íntimo de su corazón un diseño fiel del ser al que ama. Lo que aparentemente es “amor a primera ...
Introducción a La Vida Devota o Filotea

Introducción a La Vida Devota o Filotea

Tú aspiras a la devoción, queridísima Filotea, porque eres cristiana y sabes que es una virtud sumamente agradable a la divina Majestad; mas, como sea ...
Vida y anécdotas de San Felipe Neri

Vida y anécdotas de San Felipe Neri

¡Una nueva vida de santos! Y sí, porque son los santos los que nos muestran el camino, son los santos los que nos animan y ...
Benedicto XVI. Las sorpresas de un pontificado

Benedicto XVI. Las sorpresas de un pontificado

El hermano del Papa, pendiente del móvil –Soy Joseph. ¿Puedo hablar con mi hermano? Georg Ratzinger, 81 años, el hermano, también sacerdote, del nuevo papa, ...
El hijo pródigo. El que busca a Dios, lo encuentra

El hijo pródigo. El que busca a Dios, lo encuentra

Lucas inicia el capítulo quince de su evangelio presentando dos grupos de personas con dos actitudes diferentes ante la Palabra que sale de la boca ...
Al pie de La Cruz o Los Dolores María

Al pie de La Cruz o Los Dolores María

Diez años ha ya que tracé el primer bosquejo de esta obra en San Wilfrido, durante el verano de 1847; y aunque de entonces acá ...
Para mi, ¿Quién es Jesús?

Para mi, ¿Quién es Jesús?

Hace más de 500 años que el evangelio llegó a las tierras latinoamericanas. Con la espada del conquistador también vino la cruz de Jesús. Después ...
Creo

Creo

PROFESAMOS nuestra fe en Dios Trino y su Iglesia cada domingo que asistimos a Misa. ¿Sabemos lo que profesamos? ¿Entendemos lo que hacemos y decimos? ...
Oración de consagración al Sagrado Corazón de Jesús

Oración de consagración al Sagrado Corazón de Jesús

¡Señor mío y Dios mío Jesucristo! adoro reverentemente tu corazón inflamado de amor y herido por nuestros pecados, quiero ratificar cada día mi consagración bautismal ...
¡A la horca!

¡A la horca!

Apunte biográfico de Robert Hugh Benson R. H. Benson (1871-1914) fue el último de los seis hijos de Mary Sidgwick y de Edward White Benson, ...
Todo comenzó en Galilea

Todo comenzó en Galilea

Tal vez cuando hace unas semanas inicié este viaje a Tierra Santa, no imaginaba el lindo recuerdo que de él acabaría teniendo. Comenzaba sin saberlo ...
El Corazón Admirable de la Madre de Dios

El Corazón Admirable de la Madre de Dios

Cuya lectura es necesaria Decir Madre de Dios, es decir un abismo Insondable de gracia y de santidad , un océano sin límites de excelencias ...
Llama de Amor viva B

Llama de Amor viva B

Y no hay que maravillar que haga Dios tan altas y extrañas mercedes a las almas que él da en regalar; porque si consideramos que ...
Aunque todos... yo no

Aunque todos… yo no

1. Siendo el tiempo cosa de tan subido precio y el perderlo falta tan deplorable, quiero hacer una advertencia honrada con el fin de que ...
Juan Pablo II, Un papa al encuentro de los pueblos

Juan Pablo II, Un papa al encuentro de los pueblos

Karol Józef Wojtyła nace el 18 de mayo de 1920 en Wadowice, una pequeña aldea de Galitzia cerca de Cracovia, en el sur de Polonia ...
Un hombre bueno es difícil de encontrar

Un hombre bueno es difícil de encontrar

La abuela no quería ir a Florida. Quería visitar a algunos de sus conocidos en el este de Tennessee y no perdía oportunidad para intentar ...
La singular humanidad de Jesucristo

La singular humanidad de Jesucristo

Un título que podría cuadrar bien a este libro sería Problemas actuales de cristología, si no fuera demasiado pretencioso parangonar este ensayo con el célebre ...
La Iglesia

La Iglesia

Preguntar hoy por la Iglesia equivale, en gran medida, a preguntar cómo hacerla diferente y mejor. Ya el que desea reparar una radio, y más ...
0 comentarios

Dejar un comentario

¿Quieres unirte a la conversación?
Siéntete libre de contribuir!

Deja una respuesta