Feminidad Pura
Crystalina Evert
Nunca olvidaré el día en que se alejó de mí por última vez. Lo único en lo que podía pensar era que “ese chico se está yendo con algo que nunca le perteneció y que nunca recuperaré”.
Tenía quince años y sabía con todo mi corazón que eso era amor. Él me dijo que si lo amaba, se lo demostrara. Así lo hice. Pero al poco tiempo, ya no quería pasar más tiempo conmigo, sólo pasaba el tiempo con mi cuerpo. Después de eso, empecé a pensar: “bueno, yo ya no soy virgen, así que ¿qué sentido tiene ya esperar hasta el matrimonio? Para mí es demasiado tarde”. Después de eso, mientras trataba de encontrar el amor perfecto, una relación vacía conducía a otra.
Toda mujer anhela el amor, pero muchas de nosotras hemos salido heridas y hemos renunciado al verdadero amor. Empezamos a decirnos a nosotras mismas que el amor no existe o que no lo merecemos. Pero el amor sí existe y sí lo merecemos.
He titulado cada una de las veintiún secciones de este libro de acuerdo a alguna excusa, duda, inseguridad o temor que puede estar manteniéndote apartada de aquél amor que Dios tiene pensado para ti. Quizás ya te has dicho a ti misma todas esas mentiras juntas, o quizás sólo unas pocas. Pero en la medida en que te crees estas mentiras, seguirás preguntándote por qué el amor parece tan difícil de encontrar.
La verdad es que ese anhelo de amor existe en ti porque es así como Dios te creó. Estás hecha para amar, Él quiere que seas amada y Él te enseñará el camino que conduce al amor si tú se lo permites.

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