Alexis Carrel

Jacques de Mahieu

El hombre en la sociedad industrial

Hacia 1930, en Nueva York, un francés, ignorado de las masas pero célebre en los medios científicos, el Dr. Alexis Carrel, formaba parte del equipo de sabios a quienes el Instituto Rockefeller proporcionaba los medios necesarios para que se dedicaran libremente a sus investigaciones. Premio Nobel de Fisiología y Medicina en 1912, se le debían las técnicas del injerto de órganos, de la cirugía cardiológica de tórax abierto, del cultivo de tejidos en frascos y de la conservación fuera del organismo, gracias a la bomba diseñada por Lindbergh, de órganos vivos enteros. No obstante, no estaba conforme consigo mismo. Pues un hecho, científicamente comprobado, lo obsesionaba: la degeneración del hombre en el seno de la sociedad industrial.

En el siglo XIX, en efecto, el mundo occidental había sufrido una profunda transformación en todos los campos. El hombre de antes vivía en la naturaleza y respetaba sus leyes. Formaba parte de una pequeña comunidad social sólidamente organizada y jerarquizada. Se alimentaba con productos de su suelo. Registraba una reducida cantidad de imágenes que estaba en condiciones de ordenar, en su nivel intelectual. Iba a pie o a caballo, trabajaba o combatía con sus manos y soportaba el rigor del clima. Desempeñaba, en la ciudad, una función perfectamente determinada, pero, en su marco, tenía plena libertad para realizarse y, si fuera capaz de hacerlo, para crear. El maqumismo, desgraciadamente, ha destruido este modo de vida milenario.

El hombre de hoy ya no es, en la gran ciudad, sino una unidad del rebaño. Se nutre de productos de síntesis que lo envenenan poco a poco. Vive bajo el impacto constante de las imágenes, deletéreas y demasiado numerosas, del cine y de la radio —la televisión no existía aún— que invaden y desintegran su mente. Se protege artificialmente del frío y del calor. Efectúa, sin mayor esfuerzo, en la fábrica o la oficina, un trabajo rutinario y embrutecedor que trata en vano de compensar con ejercicios deportivos sistematizados. Vive en medio del ruido, al ritmo alucinante de una multitud siempre agitada. Tiende así a adoptar uno de los dos tipos que parecen configurar la humanidad de mañana: el atleta con cerebro de pájaro de los países sajones y el dormilón adiposo de los países mediterráneos. En ambos casos, adquiere las características de los animales domésticos. Y, en ambos casos, pierde su equilibrio nervioso. Las grandes ciudades están llenas de neuróticos. En los manicomios o en libertad, el número de locos de todo tipo aumenta cada día más.

Paradójicamente, es el progreso que hemos logrado en el campo científico el que constituye ]a causa de esta degeneración biopsíquica del hombre blanco. Gracias a la física y la química, hemos domesticado las fuerzas de la naturaleza, pero no hemos sabido mandarlas. La sociedad industrial no respeta desde ningún punto de vista las condiciones mínimas de vida que exige la naturaleza humana. Se ha desarrollado, en sus bases materialistas, sin preocuparse en absoluto por sus miembros. Los medios que la ciencia ha puesto a su disposición, los ha convertido en un fin en sí.

Carrel no tenía mente estrecha. Siempre se había interesado -en todos los aspectos de la actividad humana. La mística y la parapsicología —la metapsíquica, como se decía entonces— lo atraían tanto como la biología y la sociología. Decidió escribir un libro que unificara todos sus conocimientos y, sobretodo, indicara la solución. En 1932 salió, en los Estados Unidos y en Francia, La incógnita del hombre.


Para activar la descarga es necesario una suscripción. Algunos libros requieren de una suscripción premium.

epub
epub
mobi
mobi
pdf
pdf


Adquiere una suscripción

¿Ya tienes una suscripción?

Ingresa aquí:


DETALLES DE ESTE LIBRO


Más de este autor/tema


La conversión de Alexis Carrel

La conversión de Alexis Carrel

Alexis Carrel, Premio Nobel de Medicina, nació el 28 de junio de 1873 en Sainte-Foy-lès-Lyon, Francia. Su padre murió cuando Alexis era todavía muy pequeño ...
La Incógnita del Hombre

La Incógnita del Hombre

El que ha escrito este libro no es un filósofo. No es más que un hombre de ciencia. Pasa la mayor parte de su vida ...
El Santo de Nuestro Mundo

El Santo de Nuestro Mundo

  La mayor parte de los días del calendario llevan nombres de personalidades de la historia cristiana, a los que acompaña un carácter especial de ...
Vida de Cristo

Vida de Cristo

Una vida de Nuestro Señor Jesucristo no puede ser otra cosa que la trama de los cuatro Evangelios y algunas páginas del Nuevo Testamento, colocada ...
Dolores y Gozos de San José

Dolores y Gozos de San José

El Papa Juan Pablo II ha afirmado que «las almas más sensibles a los impulsos del amor divino ven con razón en José un luminoso ...
Rezar con Alvaro del Portillo

Rezar con Alvaro del Portillo

Vocación a la santidad El Señor quiere, para la generalidad de los hombres, que cada uno, en las circunstancias concretas de su propia condición en ...
La Vida De Nuestro Señor Jesucristo

La Vida De Nuestro Señor Jesucristo

Hay dos personajes en el Evangelio, Dios y el hombre, y el lugar que el hombre ocupa en él no es menor que el que ...
Beata Inés de Beniganim (Ilustrado)

Beata Inés de Beniganim (Ilustrado)

Así repetía una y muchas veces la niña, la religiosa lega, la religiosa de coro y la santa, nuestra Beata Inés de Benigánim, pues todo ...
Hacia el Padre

Hacia el Padre

EL AUTOR El P. José Kentenich (1885-1968) es el fundador de la Obra de Schoenstatt. Su proceso de beatificación fue iniciado oficialmente el Año Santo ...
El Cristo interior

El Cristo interior

En Cristo Jesús los cristianos reconocemos «la imagen visible del Dios invisible» (Col 1,15). Por medio de él vislumbramos tanto lo que es Dios como ...
Lectura fácil del Apocalipsis

Lectura fácil del Apocalipsis

Son muchos los que le tienen “miedo” al Apocalipsis. Y, tal vez, les asista la razón, porque, frecuentemente, han oído hablar de él como de ...
El enigma de la belleza. Ensayos estéticos

El enigma de la belleza. Ensayos estéticos

Nos impresiona observar cuántas formas hay de belleza, y cómo nos elevan el ánimo y nos reconcilian con la vida en momentos de desánimo, cuando ...
Tercer abecedario espiritual

Tercer abecedario espiritual

  Habiendo medianamente concluido las dos partes, es menester que para el tercer libro me sea dado nuevo favor de la beatísima Trinidad, a quien ...
Un exorcista entrevista al diablo

Un exorcista entrevista al diablo

EL AUTOR no está entre los que se avergüenzan de creer en la existencia del Diablo y de su nefasta actividad en el mundo y ...
Carta Encíclica Spe Salvi

Carta Encíclica Spe Salvi

1. « SPE SALVI facti sumus » – en esperanza fuimos salvados, dice san Pablo a los Romanos y también a nosotros (Rm 8,24). Según ...
Encíclicas del Papa Benedicto XVI

Encíclicas del Papa Benedicto XVI

1. « Dios es amor, y quien permanece en el amor permanece en Dios y Dios en él » (1 Jn 4, 16). Estas palabras ...
Por qué soy católico

Por qué soy católico

He sentido la necesidad de escribir algo relacionado con la fe que profeso: "la fe católica". Si bien existen diferentes creencias, religiones, doctrinas, en las ...
La agonía de Cristo

La agonía de Cristo

“Y dicho el himno de acción de gracias, salieron hacia el monte de los Olivos”. Aunque habla hablado de tantas cosas santas durante la cena ...
La Sábana Santa, imagen de Cristo muerto

La Sábana Santa, imagen de Cristo muerto

Hablar de la misteriosa realidad que es la Sábana Santa supone adentrarse en un tema apasionante, en un gran problema. Los adultos probablemente habrán visto ...
Discursos y homilías del papa Francisco en Ecuador, Bolivia y Paraguay

Discursos y homilías del papa Francisco en Ecuador, Bolivia y Paraguay

1. Saludo del Santo Padre en el Aeropuerto de Quito (05/07/2015) 2. Saludo y bendición a enfermos y discapacitados en el Santuario de la Divina ...
La catedral de San Agustín de Hipona

La catedral de San Agustín de Hipona

DURANTE MUCHOS AÑOS me pregunté qué aspecto físico presentaría la catedral de San Agustín a los ojos de un hombre de nuestra época que pudiera ...
Sintió compasión de ellos

Sintió compasión de ellos

“Y al ver a la muchedumbre, sintió compasión de ella, porque estaban vejados y abatidos como ovejas que no tienen pastor. Entonces dice a sus ...
Los Testigos de Jehová. La más grande herejía

Los Testigos de Jehová. La más grande herejía

Había una vez un tal Arrio. Enseñaba que Cristo no era Dios, sino la primera criatura de Dios. Hizo destrozos en la Iglesia. Pero, pasaron ...
El demonio de la acedia

El demonio de la acedia

La acedia se encuentra instalada en forma de hábitos en las sociedades y en las culturas, de modo que se puede hablar de una verdadera civilización de ...
Una lectura social del Nuevo Testamento

Una lectura social del Nuevo Testamento

Se ha repetido hasta la saciedad la frase atribuida a K. Barth de que es preciso hacer teología con la Biblia en una mano y ...
Vivir hasta despedirnos: Fotografías de Mal Worshaw

Vivir hasta despedirnos: Fotografías de Mal Worshaw

Conocí a Mal Warshaw a través de un amigo que estaba al tanto de mi trabajo con pacientes en fase terminal y también del interés ...
Y de repente, Teresa

Y de repente, Teresa

En que sabremos quién es don Rodrigo de Castro Osorio, inquisidor de gran inteligencia, fina intuición y méritos bastantes, que se atrevió a meter en ...
El evangelio de Lucas y las Escrituras de Israel

El evangelio de Lucas y las Escrituras de Israel

Este número sobre el evangelio de Lucas sigue a otros cuatro que será útil consultar, porque nosotros no repetiremos lo que aportaron en su momento ...
Santa Gema Galgani Amor Total

Santa Gema Galgani Amor Total

La vida de santa Gema Galgani puede resumirse diciendo que fue una vida de amor total a Cristo. Amor sin condiciones y hasta el fin ...
Vive, Ama, Se tu mismo

Vive, Ama, Se tu mismo

  Nuestro propósito al publicar este manojo de “pensamientos”, no es otro que el de querer aportar nuestro pequeño granito de arena en la primera ...
La Cristiandad, una realidad histórica

La Cristiandad, una realidad histórica

«Hubo un tiempo en que la filosofía del Evangelio gobernaba los Estados. Entonces aquella energía propia de la sabiduría cristiana, aquella su divina virtud había ...
Los trastornos de la personalidad como causa de nulidad matrimonial

Los trastornos de la personalidad como causa de nulidad matrimonial

¿Qué es la personalidad?. Cuando hablamos de trastornos de la personalidad nos referimos a aquellos casos en los que esta se ha ido desarrollando de ...
0 comentarios

Dejar un comentario

¿Quieres unirte a la conversación?
Siéntete libre de contribuir!

Deja una respuesta