Razones para la esperanza

José  Luis  Martín  Descalzo

Una humanidad de trapo

El reportaje más sádico ¡que he leído en toda mi vida es este que publica el dominical de uno de los diarios madrileños. Bajo el título de «Ponga un bebé en su vida» nos cuentan la última, la más grave, la más estremecedora de las locuras americanas. Por lo visto, el más inhumano hombre de negocios que ha parido la historia, llamado Xabier Roberts, ha descubierto la feroz manera de llenar las soledades de aquellos padres que quieren «jugar a papá y mamá sin tener los inconvenientes de una verdadera maternidad», como dice la nena que firma el reportaje y que, al parecer, se ha contagiado también ella del sadismo del autor del invento.

Porque esa «manera» es fabricar muñecos de trapo -¡cada uno de ellos un ejemplar único!     que luego será adoptado -no comprado- por los «candidatos a padres en esta nueva modalidad». Xabier Roberts, dice el horrendo informe., «Ofrece a los americanos no sólo muñecos que parecen bebés, sino la ilusión de que esos bebés existen de verdad». Para ello entrega sus «criaturas» con su certificado de nacimiento y todo -incluidas en él las huellas dactilares del hijo de trapo y hace jurar a los «padres» que se ocuparán de su adoptado y le ayudarán «a desarrollar su personalidad».

«Todos –cuenta la informadora- se toman en serio su profesión.» Una pareja, que aparece muy fotografiarla en el reportaje, cuenta muy en serio que han adoptado a la muñeca llamada Sadie Edna porque llevan seis años casados sin tener hijos y la abuela materna «soñaba con tener una nieta». Desde que Sadie entró en sus vidas, «la abuela está encantada. Se ocupa de ella todo el día». Por la noche, sus «padres» pasan a recogerla, la dan de cenar y la acuestan en el cuartito que los hijos de carne no vinieron a ocupar.

Xabier Roberts, que domina las artes que el marqués de Sade dejó a medio camino, ha inventado también una clínica para los bebés. Allí, los niños de trapo son atendidos por preciosas enfermeras y cuidados por diligentes médicos. En los jardines de la clínica los bebés respiran a pleno pulmón, reciben clases de francés. Y hasta cuentan con un supermercado, en el que sus papaítos adoptivos pueden gastar su sueldo en comprarles comiditas, vestiditos y zapatitos a la medida. ¡Una monada!

Y yo me he quedado sin respiración al contemplar largamente la galería de sonrientes fotos en las que se muestra todo lo que estoy contando. Sin respiración porque, mirándolas más detenidamente, me he dado cuenta de que, aunque en ellas parecen sólo de trapo los muñequitos víctimas de la adopción, también son de trapo los padres que acuden a adoptarlos, y es de trapo el señor Xavier Roberts, autor de la patraña, y son de trapo las enfermeras que les atienden y Caos médicos que les operan, y es también probablemente de trapo la muchachita que firma el reportaje que publica este dominical madrileño.

Me aterro más aún al asomarme a la ventana de mi casa. los obreros que, en la plaza de enfrente, construyen una iglesia son también ellos de trapo y es de trapo el conductor del autobús que acaba de salir de la Ciudad de los -Periodistas y se dirige hacia la plaza de Castilla.

Corro al espejo. Contemplo mi rostro ¡y es también de trapo! Toco mis mejillas de trapo con mis manos de trapo y siento que dentro de mí pecho de trapo golpea enloquecido un corazón de trapo. Bajo a la calle: es de trapo mi portero y de trapo los cuatro que trabajan en el supermercadillo en que yo hago mis compras diarias.


Para activar la descarga es necesario una suscripción. Algunos libros requieren de una suscripción premium.

epub
epub
mobi
mobi
pdf
pdf


Adquiere una suscripción

¿Ya tienes una suscripción?

Ingresa aquí:


DETALLES DE ESTE LIBRO


Más de este autor/tema


Razones desde la otra orilla

Razones desde la otra orilla

Verán, veremos, sus innumerables amigos, cómo José Luis se las compondrá para seguir presente aquí abajo, entre nosotros, haciendo cosas, publicando artículos y libros. Lo ...
Razones Para El Amor

Razones Para El Amor

Cuando, hace ahora cuatro años, comencé esta aventura de mis «razones», nunca pude imaginar lo que para mí llegarían a significar. Es asombroso: lanzas un ...
Vida y misterio de Jesús de Nazaret, III. La cruz y la gloria

Vida y misterio de Jesús de Nazaret, III. La cruz y la gloria

Jesús no fue sólo un buen maestro, ni fue únicamente un predicador de ideas revolucionarias. Empequeñeceríamos su mensaje si lo redujéramos a sus discursos, por ...
Vida y misterio de Jesús de Nazaret, I. Los comienzos

Vida y misterio de Jesús de Nazaret, I. Los comienzos

Y vosotros ¿quién decís que soy yo? (Mc 8,27). Hace dos mil años un hombre formuló esta pregunta a un grupo de amigos. Y la ...
La frontera de Dios

La frontera de Dios

Amigo Editor: No me quedo tranquilo si no escribo estas líneas. Necesito decir un par de cosas, y, aunque esto no se use, usted me ...
Vida y misterio de Jesús de Nazaret, II. El mensaje

Vida y misterio de Jesús de Nazaret, II. El mensaje

Pero ellos no entendían lo que les decía y no se atrevían a hacerle preguntas (Mc 9,32). El primer volumen de esta obra se cerraba ...
Razones para vivir

Razones para vivir

Y van… cuatro. Cuando, hace ahora cuatro años, firmé la introducción de «Razones para el amor» me prometí a mis lectores que aquélla era la ...
Razones para la alegría

Razones para la alegría

Me pregunto si la mañana de hoy es, precisamente, la ideal para escribir el prólogo de un libro que se titula Razones para la alegría ...
El Último Exorcista

El Último Exorcista

Pido disculpas a los lectores si, después de haber escrito tantos libros sobre Satanás y los exorcismos, me atrevo una vez más a presentarles uno ...
Camino San Josemaría Escrivá de Balaguer

Camino San Josemaría Escrivá de Balaguer

  Lee despacio estos consejos. Medita pausadamente estas consideraciones. Son cosas que te digo al oído, en confidencia de amigo, de hermano, de padre. Y ...
Florecillas de san Francisco de Asís

Florecillas de san Francisco de Asís

Primeramente se ha de considerar que el glorioso messer San Francisco, en todos los hechos de su vida, fue conforme a Cristo bendito; porque lo ...
Id y Evangelizad a Los Bautizados

Id y Evangelizad a Los Bautizados

En el principio de la vida de la Iglesia se bautizaba solo a los convertidos. La tarea es al contrario: convertir a los bautizados. En ...
Ignacio de Loyola

Ignacio de Loyola

A la entrada del valle sosegado, junto al ingente peñón que esconde sus crestas entre la niebla, se acurruca la ignaciana villa; Azpeitia. Su mismo ...
Doce mujeres extraordinarias

Doce mujeres extraordinarias

Nunca preví que mi libro sobre los apóstoles (Doce hombres comunes y corrientes ) sería tan bien recibido por los lectores. Estos parecieron apreciar y ...
Historia del Mundo Angélico

Historia del Mundo Angélico

Después de dieciséis años dedicados al campo teológico de los demonios, por fin, ha llegado el momento de hablar de los ángeles. Después de tanto ...
Llama de Amor viva A

Llama de Amor viva A

 Alguna repugnancia he tenido, muy noble y devota señora, en declarar estas cuatro canciones que Vuestra Merced me ha pedido, por ser de cosas tan ...
Esperanza

Esperanza

Meditaciones bíblicas para la tercera Edad Al profeta Jeremías le dice Dios en una ocasión: Que ellos se conviertan a ti, no te conviertas tú ...
La Confesión

La Confesión

En todos los acontecimientos que no son inevitables y que implican en su desarrollo la libertad y el deseo, suele el hombre buscar una solución ...
¿Qué ves en la noche?

¿Qué ves en la noche?

Evangelios y conspiraciones 15 de mayo de 2006 Si algo podemos destacar en el panorama literario de comienzos de este siglo XXI es el éxito ...
Santa Gema Galgani (Ilustrado)

Santa Gema Galgani (Ilustrado)

Gema Galgani nació el 12 de marzo de 1878 en la aldea de Camigliano, cerca de Luca, ciudad italiana, y por eso se le ha ...
Sabiduría de un pobre

Sabiduría de un pobre

La palabra más terrible que haya sido pronunciada contra nuestro tiempo es quizá ésta: “Hemos perdido la ingenuidad.” Decir eso no es condenar necesariamente el ...
María La Madre de Jesús

María La Madre de Jesús

Es costumbre en nuestro pueblo llamar a las mujeres con el nombre de María. Cuando alguien va por la calle y no sabe el nombre ...
Encuentros con Jesús

Encuentros con Jesús

De la comunicación suele darse una definición empírica: comunicar es «decir algo a alguien». Por medio del gran mundo de la Red, que se ha ...
¡El Infierno es Eterno!

¡El Infierno es Eterno!

  Querido lector, tiene usted en sus manos un libro, que puede llegar a salvar miles de almas. Nuestro Señor Jesucristo hablo claramente del infierno, ...
Obras de San Agustín Tomo XXIV

Obras de San Agustín Tomo XXIV

Fecha: Día de Navidad. Posterior al 411-412. 1. Un año más ha brillado para nosotros —y hemos de celebrarlo— el nacimiento de nuestro Señor y ...
El demonio de la acedia

El demonio de la acedia

La acedia se encuentra instalada en forma de hábitos en las sociedades y en las culturas, de modo que se puede hablar de una verdadera civilización de ...
Conocer a Jesucristo

Conocer a Jesucristo

   Al tomar este libro en tus manos, amigo lector, es posible que lo hayas hecho con una sombra de escepticismo. ¡Otra vida de Nuestro ...
Diario Espiritual de Sor Isabel de la Trinidad

Diario Espiritual de Sor Isabel de la Trinidad

Lunes 30 de enero [1899]  He tenido hoy la alegría de ofrecer a mi Jesús varios sacrificios sobre mi defecto dominante, ¡pero cuánto me han ...
El Cura de Ars

El Cura de Ars

Es propio de los grandes corazones descubrir la necesidad principal de la época en que viven y consagrarse a ella. P. LACORDAIRE El más grande ...
Ejercicio de las cuarenta Avemarías

Ejercicio de las cuarenta Avemarías

  Yo os ofrezco Virgen purísima, estas cuarenta Ave María y otras tantas bendiciones con que voy a saludaros con intención de ganar las muchas ...
El padre Pío y la oración de quietud

El padre Pío y la oración de quietud

Para dar a conocer y difundir la oración de quietud, he impartido muchos cursos de «Iniciación en la oración de quietud» en instituciones de formación ...
Poesías de Santa Teresita de Jesús

Poesías de Santa Teresita de Jesús

Tú eres, Jesús, la flor que acaba de entreabrirse, contemplando aquí estoy tu despertar primero. Tú eres, Jesús, la encantadora rosa, el capullito fresco, gracioso ...
La incredulidad del Padre Brown

La incredulidad del Padre Brown

Hubo un corto período en la vida del padre Brown durante el cual éste disfrutó o, mejor dicho, no disfrutó de algo parecido a la ...
Ortodoxia

Ortodoxia

  La única justificación posible para este libro, consiste en ser la respuesta a un desafío. Hasta un mal tirador se dignifica aceptando un duelo ...
400 Respuestas a preguntas sobre la doctrina católica

400 Respuestas a preguntas sobre la doctrina católica

Desde que puse en Internet mi libro Para Salvarte en 1997, llevo 55.000 consultas que me hacen internautas de todo el mundo con ansias de ...
Diez lecciones sobre el martirio

Diez lecciones sobre el martirio

Siglo XX, siglo de mártires En mayo de 1998, al organizarse el Calendario para el Jubileo del año 2000, se previó una conmemoración ecuménica de ...
Santo Rosario de Josemaría Escrivá de Balaguer

Santo Rosario de Josemaría Escrivá de Balaguer

Como en otros días - Lepanto!-, ha de ser hoy el Rosario arma poderosa, para vencer a los enemigos de la Santa Iglesia Romana y ...
¿Quién es este hombre? Jesús, antes del cristianismo

¿Quién es este hombre? Jesús, antes del cristianismo

El principal objetivo de este libro no es la fe, ni tampoco la historia. Puede leerse (y con esta intención se ha escrito) sin fe ...
1 comentario

Dejar un comentario

¿Quieres unirte a la conversación?
Siéntete libre de contribuir!

Deja una respuesta