El Cristo interior

Javier Melloni Ribas

Presentación

En Cristo Jesús los cristianos reconocemos «la imagen visible del Dios invisible» (Col 1,15). Por medio de él vislumbramos tanto lo que es Dios como lo que estamos llamados a ser los humanos: plenitud de receptividad y de donación. En el completo darse de Dios en Jesús y de Jesús en Dios se manifiesta el misterio «del que todos recibimos gracia sobre gracia» (Jn 1,16). Los himnos de los comienzos insisten: «en él reside la plenitud de la divinidad» (Col 1,19); «todo encuentra su recapitulación en él» (Ef 1,10); «el mismo que descendió ascendió por encima de los cielos para llenar el universo entero» (Ef 4,10). En Cristo se nos muestra nuestro destino último, para qué hemos sido traídos a la existencia: para participar de esa misma plenitud (pleroma) que sobrepasa lo que podamos esperar. Como Pablo, deseamos estar arraigados y fundamentados en él y «llegar a conocer su amor que excede todo conocimiento y ser llenados de toda la plenitud de Dios» (Ef 3,19).

«La realidad es Cristo» (Col 2,17) y lo es en cuanto que los cristianos reconocemos en él la unificación de lo divino, de lo humano y de lo cósmico en un máximo de diafanía. Esta diafanía procede de la transparencia de un modo de ser totalmente descentrado de sí que permite establecer la verdadera comunión con Dios, con las personas y con las cosas.

Lo que identificamos en Jesús está llamado a ser vivido por cada ser humano. Quien opera esta transformación es el Espíritu Santo, la dynamis divina que se derramó en Jesús, el Cristo —el «Ungido»— desde su concepción y que está presente en cada persona desde el instante mismo de su aparición por el mero hecho de existir. En la medida que nos abrimos a esta unción, nos va cristificando, nos va transformando en alter Christus.

Si bien hay una cristología descendente, y otra ascendente, también podemos hablar de una cristología interior. Interior no significa ajena al mundo, sino revelación de lo que el mundo alberga. Brota desde dentro de las cosas y de las personas no como un esfuerzo, sino como el desarrollo de una semilla (Lc 13,19), como la germinación de un núcleo oculto pero siempre presente en todo. Venimos a la vida para acoger el darse de Dios y para convertirnos en matrices de su desplegarse en el mundo.

Cada tradición religiosa es un camino hacia el desvelamiento de lo Real. Los cristianos somos aquellos que hemos sido seducidos por Jesús de Nazaret, quien de tal modo vivió abierto al Otro de sí, que descubrió que esta Alteridad le constituía como su más profunda e íntima mismidad. A través de él accedemos a la revelación de lo que somos así como somos atraídos para que nuestra existencia sea la ocasión de su transparencia.

Las presentes páginas tienen como primer soporte otras páginas: los Evangelios que nos relatan la vida de Jesús el Nazareno, confesado como el Cristo y el Hijo de Dios por sus seguidores. En cuanto que hablan de un personaje histórico, remiten a una exterioridad, lejana en el espacio y en el tiempo y, como tal, inaccesible; pero, como manifestación del eterno darse de Dios, somos contemporáneos suyos. Cada generación es equidistante de Cristo y es capaz de Cristo. Por medio de esta contemporaneidad no sólo accedemos a su exterior, sino que le habitamos y somos habitados por él. El trasvase de lo exterior a lo interior se produce por la meditación y la contemplación asiduas de tales textos. Nos advienen noticias suyas a través de palabras escritas, y por ello las consideramos sagradas, porque recogen la enseñanza y los relatos de un camino vivido anticipadamente por él. La sacralidad del texto tiene su culminación cuando transforma al que lo lee.

Nosotros recurrimos a los Evangelios, tal como para otros caminos existen otros textos. En estas páginas vamos a entrar en algunos de los nuestros. Son textos iniciáticos, que crecen con quien los lee, tal como dijera Gregorio Magno. Crecer significa aquí abrirse y dejarse configurar por la forma crística de la que Jesús es pauta y modelo arquetípico, mysterium coninctionis de lo pasado, lo presente y lo que está por venir, que ya está viniendo en este ir y venir por los textos y por la vida hacia él.


Para activar la descarga es necesario una suscripción. Algunos libros requieren de una suscripción premium.

epub
epub
mobi
mobi
pdf
pdf


Adquiere una suscripción

¿Ya tienes una suscripción?

Ingresa aquí:


DETALLES DE ESTE LIBRO


Más de este autor/tema


Perspectivas del absoluto

Perspectivas del absoluto

Los pensamientos y las palabras maduran como resultado de un proceso que no depende de la propia voluntad. Crecen en lo profundo, desde su raíz ...
Los caminos del corazón

Los caminos del corazón

Nada nos pertenece. El hombre es sólo un eslabón en medio de la sucesión de generaciones innumerables. Cada hombre y cada generación tienen por tarea ...
Conocimiento Espiritual de la Filocalia

Conocimiento Espiritual de la Filocalia

Nada nos pertenece. El hombre es sólo un eslabón en medio de la sucesión de generaciones innumerables. Cada hombre y cada generación tienen por tarea ...
La familia que alcanzó a Cristo

La familia que alcanzó a Cristo

La Hermana Superiora dejó el libro cuidadosamente. Era una "Vida de San Bernardo de Clairvaux". Después, con tono de reproche, exclamó: —¡Ya le daría yo ...
Ensayos del Cardenal Karol Wojtyla

Ensayos del Cardenal Karol Wojtyla

Presentación a la Conferencia Internacional conmemorativa del séptimo centenario de la muerte de Santo Tomás de Aquino, Roma-Nápoles, 17 al 24 de Abril de 1974 ...
Salvifici Doloris

Salvifici Doloris

1. 'SUPLO en mi carne -dice el apóstol Pablo, indicando el valor salvífico del sufrimiento- lo que falta a las tribulaciones de Cristo por su ...
Carta Encíclica Dives in misericordia

Carta Encíclica Dives in misericordia

« Dios rico en misericordia »   es el que Jesucristo nos ha revelado como Padre; cabalmente su Hijo, en sí mismo, nos lo ha manifestado ...
El castigo de los Ángeles

El castigo de los Ángeles

El aviso. Nada parecía extraño. Los viñedos descansaban bajo el látigo castigador del verano, dejando que sus hojas verdes comenzaran a tornarse hacia el esperado ...
La catedral de San Agustín de Hipona

La catedral de San Agustín de Hipona

DURANTE MUCHOS AÑOS me pregunté qué aspecto físico presentaría la catedral de San Agustín a los ojos de un hombre de nuestra época que pudiera ...
Historia del Mundo Angélico

Historia del Mundo Angélico

Después de dieciséis años dedicados al campo teológico de los demonios, por fin, ha llegado el momento de hablar de los ángeles. Después de tanto ...
Orar con el Evangelio de Mateo

Orar con el Evangelio de Mateo

Dios es Palabra de vida “En el pasado muchas veces y de muchas formas habló Dios a nuestros padres por medio de los profetas. En ...
Sermones Pastorales

Sermones Pastorales

Quiero, en estas cinco veladas de domingo, tratar de hacer algo que tiene cierto carácter de audacia, no porque se haya intentado pocas veces, sino ...
Entre el brocal y la fragua

Entre el brocal y la fragua

Cuando chico, muchas veces me tocó ir y venir del pozo al eucalipto, y de éste al pozo, montado en un petizo que, a lazo ...
Carta Encíclica Divini Illius Magistri

Carta Encíclica Divini Illius Magistri

CARTA ENCÍCLICA DIVINI ILLIUS MAGISTRI DE SU SANTIDAD PÍO XI SOBRE LA EDUCACIÓN CRISTIANA DE LA JUVENTUD A TODOS LOS PATRIARCAS, PRIMADOS, ARZOBISPOS, OBISPOS Y ...
Las quince oraciones de Santa Brígida de Suecia

Las quince oraciones de Santa Brígida de Suecia

  Por mucho tiempo, Santa Brígida había deseado saber cuántos latigazos había recibido Nuestro Señor en Su Pasión. Cierto día se le apareció Jesucristo, diciéndole: ...
Mi carrera con el diablo: Del odio racial al amor racional

Mi carrera con el diablo: Del odio racial al amor racional

AQUEL fue el día más negro de mi vida. Me encontraba sentado en una celda de la prisión londinense de Wormwood Scrubs, el segundo día ...
El Poder de La Palabra

El Poder de La Palabra

Este es un libro para reflexionar. La vida es algo muy serio y hay que vivirla con seriedad y responsabilidad. Dios nuestro Padre nos ha ...
Abandónate en Dios

Abandónate en Dios

Entendí que nuestro Señor no llama a los que son dignos, sino a los que él quiere. Teresa de Lisieux Cuando nos encontramos con la ...
Jesucristo, horizonte de esperanza I y II

Jesucristo, horizonte de esperanza I y II

 Los compañeros y amigos de Manuel Gesteira sabíamos desde hace varios años que preparaba una cristología, resultado de sus muchos años de docencia en la ...
El Jardín Interior

El Jardín Interior

Este libro se dirige a quien -creyente o no- considere una dimensión inalienable de la propia experiencia aquella interioridad que no cesa de interrogarse y ...
Florecillas de san Francisco de Asís

Florecillas de san Francisco de Asís

Primeramente se ha de considerar que el glorioso messer San Francisco, en todos los hechos de su vida, fue conforme a Cristo bendito; porque lo ...
El maravilloso secreto de las almas del purgatorio

El maravilloso secreto de las almas del purgatorio

El cómo y el porqué de estas páginas Hace unos años tuve ocasión de leer, con gran interés, un libro sobre las almas del Purgatorio ...
El Espíritu Santo en la Biblia y en nuestra vida

El Espíritu Santo en la Biblia y en nuestra vida

Cuando era niño, escuchaba a los predicadores que, como escandalizados, narraban la escena en que San Pablo llega a Efeso y se encuentra con un ...
Idolatría y Biblia

Idolatría y Biblia

Hace algún tiempo, en una reunión del equipo pastoral de la zona en que trabajaba en la arquidiócesis de Cuenca (Ecuador), se constataba el impacto ...
Al encuentro con Jesús

Al encuentro con Jesús

PRESENTACIÓN La vida de todos los seres humanos, nace, crece, y llega a su madurez, en, por, y para el “encuentro”. El “encuentro” de los padres ...
Don y Misterio

Don y Misterio

Permanece vivo en mi recuerdo el encuentro gozoso que, por iniciativa de la Congregación para el Clero, tuvo lugar en el Vaticano en el otoño ...
El evangelio de Lucas y las Escrituras de Israel

El evangelio de Lucas y las Escrituras de Israel

Este número sobre el evangelio de Lucas sigue a otros cuatro que será útil consultar, porque nosotros no repetiremos lo que aportaron en su momento ...
Cuando la Iglesia era joven

Cuando la Iglesia era joven

Cuando una estrella nueva apareció en Belén, la pequeña y soñolienta aldea era territorio ocupado. Sesenta años atrás, un ejército extranjero atravesó la región reclamando ...
El nuevo ritual de exorcismos

El nuevo ritual de exorcismos

El padre Gabriele Amorth es un respetado exorcista de Roma. A continuación, se encuentra una entrevista que el Padre Amorth concedió al periódico italiano 30 ...
Al encuentro de la vida

Al encuentro de la vida

Nuestra condición de peregrinos pertenece a este mundo que pasa. Caminamos, a través del encuentro con nosotros mismos, hacia el encuentro con Dios. Caminamos. «Hacemos ...
Cristología de los primeros maestros franciscanos

Cristología de los primeros maestros franciscanos

La primer escuela franciscana de teología fue la Oxford (1228), cuando el célebre maestro Roberto di Grosseteste llevó su cátedra al convento de los franciscanos ...
La amistad de Cristo

La amistad de Cristo

Robert Hugh Benson nació en el Wellington College el 28 de noviembre de 1871. Era el hijo menor de Edward White Benson, entonces arzobispo de ...
Las formas espirituales de la afectividad

Las formas espirituales de la afectividad

Hay ciertas tesis generales que nunca se han demostrado y que tampoco son en modo alguno evidentes, pero que desgraciadamente perduran sin embargo en la ...
0 comentarios

Dejar un comentario

¿Quieres unirte a la conversación?
Siéntete libre de contribuir!

Deja una respuesta